Los fantasmas leen a Selva Almada

Una chica de provincia y Niños, y el libro de poemas Mal de muñecas fue el comienzo. Selva Almada, la estudiante de Villa Elisa, Entre Ríos, que abandonó Comunicación Social para estudiar Literatura en Buenos Aires, se convirtió en escritora y al poco andar la crítica y los lectores la llenaban de alabanzas. En medio del boom femenino de las letras argentinas, Selva, de 48 años, comparte las alturas con Mariana Enríquez, María Gaínza, María Moreno, entre otras. Ya la leen en francés, inglés, italiano, portugués y alemán. La han comparado con el uruguayo Juan Carlos Onetti y ella ha dicho: "fue el primer escritor que sentí que era un faro a seguir". Le enorgullece el mote de "escritora de #provincia" porque, dice, la emparenta con "Sarmiento", pilar de la literatura trasandina. Se identifica con el narrador que se instala en la periferia. Convertida en súper ventas gracias a libros como El viento que arrasa y Chicas muertas, Selva Almada dice: "el #lector me parece como una entidad fantasma, porque no sabés si una vez que termines un libro ese #libro va a tener lectores".

Puedes seguirla en @selva.almada.
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